Fandos, Cecilia Alejandra
Resumen
Desde la década de 1890 en el departamento puneño de Cochinoca de la provincia de Jujuy, se inició latransferencia de las amplias superficies de tierra pública a manos privadas. Con ese resultado se finiquitóel proceso inaugurado con la sublevación de la población campesina arrendataria, circunscripta al áreade influencia de una de las principales haciendas de la provincia, a partir de 1872. El extendido sucesopuso en el tapete del escenario político la “cuestión de la tierra” ligada al ejercicio de derechos depropiedad comunal de raíces coloniales. Con la manifestación campesina estas tierras que detentaba encarácter de propiedad privada la familia Campero, heredera del Marquesado de Tojo, fueron reconocidascomo propiedad pública en un fallo de la Corte Suprema de Justicia (1877).Al comenzar los primeros remates de esas tierras se desató nuevamente una situación de convulsiónsocial, protagonizada por la población asentada y residente en la región, la que quedó prescindida delacceso a las mismas. El reclamo se orientó a la preservación de la propiedad pública en oposición a lapropiedad privada, como un escenario social más justo y afín a sus intereses y modos de vida. En elartículo se recorre una serie de expedientes existentes en el Archivo Histórico de la Provincia de Jujuyque permiten reconstruir esta circunstancia precisa. De su análisis recorremos la situación implicadaen la nueva condición de arrendatarios de tierras privadas de la mayor parte de los habitantes, suspeticiones, sus argumentos, las marcas de legitimidad invocadas en la defensa de sus derechos, lasacciones y las respuestas de diversos actores.
Palabras clave:
ESTRATEGIA, ACCIÓN INDÍGENA, PROPIEDAD, PUNA-JUJUY
Fecha de publicación: 03/2016
Editorial: Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano
Revista: Cuadernos Series Especiales
ISSN: 2362-1958